Cala Bassa, una de las playas más frecuentadas de Ibiza, destaca por un entorno natural magnífico y también por su ambiente tranquilo y familiar. Además, por sus aguas limpias y transparentes, de poca profundidad, y por su práctico acceso, resulta idónea para ir con niños.
Es una playa muy bien comunicada, a la que podrás acceder en coche y aparcar muy cerca de la playa sin mucha dificultad. Durante los meses de verano, también podrás disfrutar de un servicio regular de ferry que te dejará en la misma playa.
Dispone de aparcamiento, servicio de alquiler de hamacas y sombrillas, baños públicos, oferta variada de deportes acuáticos y servicio de socorrista. Además, para comer o cenar tienes a tu disposición una amplia oferta de chiringuitos, bares y restaurantes, entre ellos un conocido beach club.
Si buscas una playa idílica donde poder contemplar una puesta de sol magnífica, esta playa es perfecta para ti.
Cala Conta, formada por varias calitas más pequeñas, es una de las playas más apreciadas de la isla. Sus aguas claras y transparentes y sus arenas blancas te transportarán a un auténtico paraíso en la tierra.
Aquí, podrás practicar esnórquel y descubrir los fondos marítimos de Ibiza, que, con sus praderas de posidonia oceánica, han sido declarados patrimonio de la humanidad de la Unesco.
También es una playa que cuenta con múltiples servicios, como alquiler de hamacas y sombrillas, socorrista, chiringuito y varios restaurantes, por lo que resulta idónea para ir en familia.
Quizá, lo mejor son sus vistas espectaculares a la Illa de sa Conillera, d’es Bosc, de s’Espartar o de ses Bledes. ¡Espectacular!
Cala Salada es una cala muy tranquila, ubicada en una zona poco urbanizada, que se halla rodeada de acantilados y de un entorno natural magnífico.
Contigua a Cala Salada, encontrarás Cala Saladeta, a la que podrás acceder desde Cala Salada, atravesando una zona de rocas o, mejor aún, por encima del acantilado entre los pinos y descendiendo por unas escaleras que llegan hasta el mar.
Cala Salada, de aguas cristalinas y un paisaje típicamente mediterráneo, es una playa de fácil acceso y ambiente familiar. Cuenta con servicio de duchas, alquiler de hamacas y sombrillas, velomares y un restaurante.
En cuanto a Cala Saladeta, por su acceso más complicado y la falta de servicios, es una playa de ambiente más juvenil.
Si visitas estas playas de junio a septiembre con vehículo propio, debes tener en cuenta que el número de vehículos está limitado y que es muy probable que tengas que estacionar en el parking gratuito de las piscinas municipales de San Antonio y utilizar el autobús L34, o una buena alternativa es el servicio de barcas desde San Antonio.
Punta Galera es una playa totalmente diferente, que, sin duda, te dejará con la boca abierta por la belleza de sus paisajes.
Se trata de una zona costera en la que las rocas lisas y planas se distribuyen a modo de terrazas. Es en ellas donde los bañistas aprovechan para extender sus toallas y tomar el sol, practicar yoga o, simplemente, descansar.
Es una playa poco frecuentada, muy tranquila, sin ninguna clase de servicios e idónea para la práctica del nudismo.
Estas dos pequeñas playas, tranquilas y de ambiente familiar, se encuentran ubicadas en una bahía cerrada, a aproximadamente 1 kilómetro a pie de nuestro hotel. Por sus aguas transparentes, de poca profundidad y protegidas de vientos y mareas, es perfecta para las familias con niños.
Su entorno natural, colmado de pinares y otra vegetación típicamente mediterránea, es fabuloso.
Cala Gració, además, cuenta con servicio de socorrista y chiringuito y dispone de una pasarela de acceso para personas con movilidad reducida.
No obstante, si deseas disfrutar de un ambiente más tranquilo, puedes acceder a Cala Gracioneta por un caminito que rodea la costa. Lo único que deberás tener en cuenta es que, al ser de reducidas dimensiones, esta pequeña cala se llena de gente con mucha facilidad.
Muy cerca de San Antonio, a continuación del paseo de Ses Variades y a solo 2 minutos a pie desde nuestro hotel, encontrarás esta cala de fácil acceso, conocida por sus impresionantes puestas de sol.
Esta playa dispone de una gran variedad de servicios, como, por ejemplo, alquiler de hamacas y sombrillas, patines de agua, duchas y una plataforma de acceso para personas con movilidad reducida. Además, encontrarás una variedad de bares, terrazas y restaurantes entre los que podrás elegir.
Como su nombre indica, esta playa es un puerto natural de arena que se encuentra emplazada junto a la desembocadura de un torrente.
Se trata de una playa turística, rodeada de hoteles, apartamentos y zonas comerciales, que suele estar bastante frecuentada tanto por turistas como locales.
Su paisaje natural mediterráneo y las típicas casetas varadero hacen que esta playa cuente con un encanto especial.
Destaca por estar protegida de fuertes vientos y, como si de una piscina natural se tratara, sus aguas son tranquilas y de poca profundidad, perfectas para las familias con niños.
La playa, además, cuenta con infinidad de bares y restaurantes, con un servicio de alquiler de hamacas y sombrillas, duchas y ofertas para la práctica de deportes acuáticos, así como una gran variedad de servicios a tu disposición.
A pesar de ser una playa de arena fina, en sus márgenes encontrarás una zona de rocas que resulta ideal para los incondicionales del esnórquel.
En definitiva, Port des Torrent es una playa de fácil acceso, a la que podrás acceder con tu vehículo particular o, si lo prefieres, en la línea regular de autobuses o mediante un servicio de barcas desde San Antonio.
Como ves, son muchas las playas y calas a las que puedes acceder cómodamente desde San Antonio. ¡Prepárate para descubrirlas todas y disfrutar de estos incomparables tesoros ibicencos!